Magallanes
Con el llanto de un acusado y el silencio de Adalio: Se inició juicio por el cruel homicidio de Roberto Verdugo
Esta mañana (6 de diciembre) se inició el juicio en contra de Adalio Mansilla Quinchamán y su sobrino Fabián Peña Mansilla, autor confeso del asesinato y desmembramiento de Roberto Verdugo Vargas, joven estudiante que tuvo la mala suerte de cruzarse con ambos sujetos a pocos metros de llegar a su domicilio, ingresando al inmueble en que estaban a fin de compartir un poco de alcohol. Trágicamente, en dicha vivienda encontraría la más macabra de las muertes.
Para siete días fue programado este juicio oral, el cual considera la declaración de 30 testigos y 9 peritos, y en esta jornada, la Fiscalía y el abogado querellante plantearon la autoría sobre ambos acusados en igual grado participación, como ejecutores de un delito de homicidio calificado.
No obstante, las defensas argumentan escenarios distintos. En el caso de Peña Mansilla, su defensor estima que su participación no lo incriminaría como autor, ya que él no habría participado directamente en el asesinato, sino que su tío habría ejecutado dicha acción, de la que Peña se habría percatado al despertar.
Asimismo, afirmó que si bien tuvo acción directa en el desmembramiento habría sido por miedo a su tío y su forma desquiciada de comportarse.
La defensa de Mansilla Quinchamán por su parte, si bien reconoce la autoría del crimen, no lo catalogó como homicidio calificado, sino que un homicidio simple, ya que el actuar de su representado habría estado condicionado por el estado de intemperancia del asesino.
Declaración del acusado
Al inicio de todo juicio oral, la terna de jueces ofrece a los acusados la posibilidad de contar su versión de los hechos libremente, para que luego sean interrogados por los abogados litigantes. Sin embargo, también les advierten que tienen el derecho a guardar silencio, ya que todo lo que digan podría ser utilizado en su contra.
En esta jornada Mansilla Quinchamán guardó silencio aconsejado por su defensor, no así Peña Mansilla, quien declaró ante los jueces, relatando lo que el afirma haber ocurrido esa noche.
Dijo en gran parte lo que ya se sabe, que él y su tío estaban bebiendo en el antejardín de su domicilio la madrugada del 14 de enero de 2023, cuando se les acercó Roberto Verdugo para pedirle alcohol, entrando todos a la vivienda.
Recordó que ahí estuvieron conversando de futbol, bebiendo y jugando a hacer sombras con sus manos. Incluso afirmó que hubo una suerte de “manotazos” y que el tío los habría detenido para que “no se picaran”.
Afirmó en su declaración que después de mucho beber tomó unos medicamentos y se fue a dormir, encontrando al despertar y salir de su dormitorio el macabro escenario, paredes ensangrentadas y a su tío descuartizando a la víctima en el baño.
Aseguró que sintió temor y haber quedado en shock, y que cómo Mansilla Quinchamán le pidió, tomó un cuchillo e intentó arrancarle uno de los brazos a la víctima, instante en que, al recordar aquello, se quebró y rompió en llanto ante los jueces, quienes tuvieron que dar un momento para que se repusiera y continuara con su relato.
Según él, apenas pudo seguir con la acción por un minuto ya que estaba asqueado, pasando poco tiempo hasta que su hermana llegó a buscarlo, ya que de manera telefónica Mansilla Quinchamán ya había dado cuenta a familiares del nuevo y atroz crimen que había cometido.
La primera parte de este estremecedor juicio concluyó con la revisión de los registros de las cámaras de vigilancia que grabaron las horas previas al crimen del joven Roberto Verdugo comprando en un local comercial y transitando por el centro de Punta Arenas.