Magallanes
Buscan convertir botaderos de la Senda de Penetración Vicuña – Yendegaia en infraestructura turística

La geografía del Parque Nacional Yendegaia, ubicado al sur de la isla Tierra del Fuego, alberga al menos tres áreas fiscales que en su momento fueron utilizadas como botaderos de escombros y campamentos de operación por el Cuerpo Militar del Trabajo (CMT). Estas zonas sirvieron como apoyo a la construcción de la senda de penetración, una emblemática ruta que el Ministerio de Obras Públicas busca concluir en el próximo quinquenio.
Ante el creciente flujo de visitantes en la comuna de Timaukel y la instalación de nuevos servicios públicos vinculados a la conservación ambiental, estos terrenos han adquirido un valor estratégico para el desarrollo de infraestructura y la prestación de servicios turísticos. Con este objetivo, la Secretaría Regional de Bienes Nacionales realizó una inspección en terreno de los botaderos, actualmente en proceso de recepción por parte del Servicio de Evaluación Ambiental.
El recorrido contó con la participación del alcalde de Timaukel, Luis Barría, quien facilitó el traslado del equipo ministerial en un bus municipal. También estuvieron presentes el delegado provincial José Miguel Campos y el administrador municipal José Barría, quienes exploraron posibilidades de inversión pública y privada para fortalecer el turismo de intereses especiales en la zona.
“Hemos llegado hasta el final del camino que el Cuerpo Militar del Trabajo ha desarrollado en el parque Yendegaia y en el trayecto visitamos dos de los botaderos que queremos administrar con proyectos que impulsen la seguridad económica y el desarrollo sustentable, pilares del gobierno del presidente Gabriel Boric”, indicó el Secretario Regional de Bienes Nacionales, Sergio Reyes. Agregó que ya existe coordinación con el Ministerio de Obras Públicas para definir el plan de cierre de los trabajos finalizados y dar paso a nuevas obras.
Para el delegado provincial José Miguel Campos, la ruta a Yendegaia es “una de las más hermosas de la región y del mundo”, por lo que es prioritario generar una visión de futuro para garantizar su preservación y habilitar la infraestructura necesaria para los visitantes y la institucionalidad ambiental que resguarda el área.
Por su parte, el alcalde Luis Barría destacó la importancia de contar con autoridades en terreno que evalúen el potencial del territorio tanto para la inversión privada como para la apertura de nuevos espacios recreativos. En ese sentido, junto al administrador municipal, han desarrollado un circuito turístico comunal que se complementa con iniciativas binacionales, como la Ruta del Fuego.
Preocupación por incendios en un ecosistema vulnerable
El aumento de visitantes por el paso Río Bellavista ha generado inquietud entre las autoridades, considerando la fragilidad del ecosistema. “Calculamos que unas siete mil personas ingresaron al sector el último año, tres mil de ellas dedicadas a la pesca deportiva, mientras que otras han comenzado a aventurarse más allá de Caleta María y Lago Fagnano, incluso hasta el ingreso del parque”, señaló el alcalde Barría, resaltando la necesidad de planificación ante la creciente demanda turística.
Desde la Secretaría de Bienes Nacionales hicieron un llamado a prevenir incendios forestales, enfatizando la responsabilidad de los visitantes. “Nos preocupa que acciones como las fogatas bajo el puente del río Azopardo se estén volviendo recurrentes, poniendo en riesgo la seguridad de las personas y el valioso patrimonio natural de más de 100 mil hectáreas que conforman el Parque Nacional Yendegaia”, advirtió Sergio Reyes, reafirmando el compromiso de las instituciones en la protección de esta área silvestre protegida.
