Drama familiar: Más que sólo daño dejó conductor ebrio que chocó contra una casa

Consecuencias mucho más complejas que el destrozo de un muro dejó el actuar del individuo ebrio que, la mañana de este miércoles (19 de febrero), chocó el vehículo que conducía contra la fachada de una casa de la población Cerro Primavera. Una modista perdió todas sus herramientas de trabajo, con lo que generaba los ingresos para mantener su humilde hogar y a su esposo enfermo.

Apenas unos segundos podía conversar Juanita Riquelme Robles antes de romper en llanto. Y cómo no empatizar con la angustia de esta dueña de casa que estuvo a poco de ser atropellada por el conductor que embistió su vivienda de calle Daniel Cruz Ramírez Nº0456.

El estruendo

Hoy, doña Juanita debía levantarse temprano para hacer algunos trámites respecto de sus anteojos. Antes de entrar al baño para ducharse, providencialmente fue al cuarto de su hija que la llamaba. Fue en este momento que el Kía Sorento destrozó el frontis del inmueble, luego que su conductor, bajo los efectos del alcohol, chocara contra la vivienda; eso sí, no sin antes destrozar un poste del tendido eléctrico en el exterior.

La afectada no daba crédito de lo sucedido, ya que la ducha que pretendía usar minutos antes ya no existía más, ni tampoco su taller de costuras, el sustento de su familia.

Del vehículo, apenas pudo bajar el conductor bajo los efectos del alcohol, a quien ella misma intentó auxiliar al ver la gravedad del hecho. El individuo fue retenido por un vecino, y detenido luego por Carabineros. Este jueves enfrentará a la justicia por el delito de manejo en estado de ebriedad provocando daños, según se le informó a El Magallánico en la 1ª comisaría de Punta Arenas.

Daños más allá de lo imaginable

Con el paso de las horas, se repuso el suministro eléctrico del barrio por parte de Edelmag, fue retirado el vehículo que protagonizó el hecho, y vecinos y amigos ayudaron a la familia afectada a limpiar el desastre .

Sin embargo, poco a poco fue quedando en evidencia el perjuicio mayor ocasionado. La modista perdió todas sus máquinas de costura y maniquíes; además de su refrigerador y lavadora. Asimismo, fue evidente el daño estructural, ya que no sólo la pared del frente fue arrasada por el vehículo, sino que paneles interiores también fueron destrozados deformándose la vivienda.

A un costado de su casa, esta tarde se observaban los restos de lo que parecía una remodelación, o demolición de una vivienda, pero no, eran sus enseres destrozados que junto a vecinos pudo sacar.

Prácticamente, doña Juanita, quedó con “las manos cortadas” para cumplir los pedidos escolares de costuras y bordados que le encargaron, de paso, deberá responderle con la devolución de dinero a sus clientes.

Lo que más la angustia, es el dinero al que no podrá acceder para comprar los medicamentos del tratamiento de su esposo, quien sufre Parkinson y una compleja enfermedad mental.

Para peor, debido al daño estructural que sufrió su domicilio, debieron ser cortados los suministros básicos, hasta que sea nuevamente habitable, aunque en realidad, ella ni su esposo ni su hija tienen la posibilidad de estar en otro lugar, por lo que deberán ingeniárselas para continuar en el destrozado inmueble.

El espacio en que funcionaba el taller de la modista. No quedó nada.

Solidaridad

Estremecedor es conocer el caso de la familia afectada. El ver cómo en un segundo sus vidas que, pese a las dificultades que sobrellevaban, podían sobrellevar, cuestión que ahora será muy complejo.

Algunos vecinos ya comenzaron a tender una mano a los afectados. Sin embargo, apelan a la solidaridad de la comunidad, y hacen un llamado a quienes puedan ayudar con materiales de construcción , para poder reconstruir su hogar cuanto antes.

Finalmente, y entendiendo el duro golpe económico que significará para doña Juanita el haber perdido sus herramientas de trabajo, se hace un llamado a quienes puedan colaborar con equipos de costura nuevos o usados que puedan facilitarle para continuar con su trabajo y pueda así seguir llevando el sustento a su hogar.

Quienes deseen colaborar con los damnificados, pueden contactarse con Paula Álvarez, hija de doña Juanita, al número telefónico +56 9 91990904.

Vestigios de lo que era el baño de la familia damnificada.

Tras remover el vehículo quedó en evidencia los daños materiales que provocó el condenable choque.