Explorador de la Vida y la Salud: Marcos se une a El Magallánico

Por: Marcos E. Chandía Ayala
Educación Física; Kinesiología y Actividades Outdoor.

Con una trayectoria enriquecida por mi amor a la educación y mi compromiso con la salud, me uno al equipo de columnistas de “El Magallánico”. Con una doble formación en Educación Física y Kinesiología, he forjado mi carrera centrada en dos pasiones: la enseñanza y la rehabilitación.

Como educador, he encontrado mi vocación en la transmisión de conocimientos, siendo un apasionado defensor de la salud integral, el ejercicio físico y el deporte. Me especializo en el tratamiento de enfermedades metabólicas como: diabetes, obesidad y cáncer por medio del ejercicio físico. No solo abordo la rehabilitación, sino que también me destaco como orientador en aspectos clave de la salud preventiva.

Fuera de las aulas y consultas, me embarco en expediciones como montañista, explorando la naturaleza en su estado más puro. Mi espíritu aventurero se extiende más allá del ascenso a cerros, ya que soy miembro activo del Cuerpo de Socorro Andino de Chile, una institución dedicada voluntariamente a la búsqueda y rescate de personas en lugares montañosos y de difícil acceso, dedicando mi tiempo y esfuerzo a esta noble causa, aportando mi experiencia y compromiso al servicio de la seguridad y el bienestar en entornos desafiantes. Mi compromiso con la seguridad y el bienestar se extiende más allá, ya que, en el pasado y por varios años, también formé parte del Cuerpo de Bomberos de Punta Arenas, demostrando así mi profundo compromiso con la solidaridad hacia la comunidad.

En la actualidad, desempeño un papel fundamental como Profesor de Educación Física y además asumo responsabilidades administrativas en el emblemático Liceo Polivalente “Sara Braun” ubicado en Avenida Colón 1027 de la ciudad de Punta Arenas. Mi dedicación a la educación se manifiesta tanto en el aula como en las tareas administrativas, contribuyendo al desarrollo integral de los estudiantes y a la eficiencia de la institución.

Conmigo, los lectores de “El Magallánico” pueden esperar columnas que fusionan sabiduría educativa y experiencias de vida. Mi perspectiva única, derivada de mis múltiples roles como educador, terapeuta y aventurero, aportará una nueva dimensión a la sección, ofreciendo a los lectores una guía sólida hacia una vida plena y saludable.