Magallanes
Familia se querelló por muerte de buzo profesional en planta salmonera
Este lunes (1 de julio) ingresó a tramitación la querella que interpuso la familia del buzo Manuel Neira Araneda, de 39 años, profesional que falleció hace dos años mientras realizaba trabajos en mallas loberas en una planta salmonera de Nova Austral, que operaba en el Seno Chasco, a poco más de 150 kilómetros de Punta Arenas. La acción judicial persigue a los responsables de un eventual cuasidelito de homicidio.
De acuerdo a los antecedentes argumentados en la querella, testimonios de ex trabajadores de la empresa Diver Chile, firma subcontratista de Nova Austral, para la cual el occiso prestaba servicios, llevaron a los familiares a sospechar respecto del fallecimiento de Neira, cuya causa de muerte quedó establecida como “asfixia por inmersión”.
En el segundo acápite del escrito judicial se detalla que, si bien se entienden los riesgos que conlleva la compleja profesión, existen parámetros mínimos de seguridad establecidos por ley, por ejemplo: componentes mínimos de uso personal, traje de buceo, aletas de propulsión, tablas de descompresión, válvula de corte rápido, entre otros.
Respecto de lo anterior, se consigna en la querella que la empresa “debió haberlo equipado con una máscara de comunicación, con arnés con sus respectivos mosquetones y mono botellas de emergencia de alta presión lo cual conforme a las diligencias investigativas nunca se le suministró, por lo cual, al no contar con el equipo adecuado, se impidió poder activar las medidas de escape establecido en el plan de contingencia”.
Se afirma además que las indagaciones realizadas hasta el momento apuntarían a que no se habrían tomado los controles escritos respecto de tiempos y profundidad, cuestión que también habría sido relevante en el fatídico desenlace del profesional.
Cabe recordar que los hechos relatados en la querella se remontan al 23 de abril de 2017, cuando el buzo se sumergió a trabajar en el corte de tensores, no saliendo nuevamente a la superficie. A raíz de lo sucedido, se iniciaron arduas labores de rescate que concluyeron la tarde del 30 de abril, cuando a 67 metros de profundidad fue recuperado el cuerpo de Neira Araneda.
Finalmente, la familia querellante solicita se le tome declaración a un ex trabajador de Diver Chile, quien habría entregado antecedentes respecto de las supuestas condiciones precarias de seguridad con las que la empresa operaba; se cite a declarar a ejecutivos de la firma y se ordene la reactivación de la causa, ya que la Fiscalía había archivado provisionalmente la causa.